¡Feliz año a tod@s!
En este post especial de Navidad (aunque acabe de terminar) no sólo contaremos los experimentos reposteros que hicimos en la Navidad de 2013, sino la comida que lo acompañó.
Para el menú de Navidad de ese año se nos ocurrió hacer una espectacular pizza con forma de árbol de Navidad, acompañado de (por mantener la temática italiana) un par de buenos provolones al horno.
En primer lugar, unimos dos masas de pizza y las recortamos con forma de árbol de Navidad. Se cubre con una capa de tomate frito.
Se cubre bien con queso para gratinar (preferimos la mezcla de 4 quesos de gratinar al mozzarella, por dar más sabor).
Para hacer los detalles verdes que simulan las hojas del abeto utilizamos pimiento verde.
Y los adornos navideños, como pueden ser las bolas y las guirnaldas, las simulamos con chorizo, jamón serrano y tomates cherry.
El queso provolone se preparó colocando en un par de cuencos de barro una base de tomate frito con orégano, encima del cual se asienta el queso provolone que fue especiado con orégano.
Una vez todo preparado se introdujo en el horno. Tras su cocción, se decoró la pizza-árbol con rúcula fresca, quedando un resultado bastante atractivo.
Este es un blog de repostería, por lo que no puede faltar la guinda repostera de tan navideña comida: el Roscón de Reyes casero.
Es la primera vez que me planteé hacer un roscón de Reyes, resultó ser un poco trabajoso, pues la masa, al emplear levadura madre, ha de reposar durante unas horas.
Pero el resultado mereció la pena:
He de reconocer que la masa, al emplear harina comercial, no fue tan suave como los roscones que se compran en una pastelería. Pero el sabor, gracias a la esencia de Azahar, fue delicioso.
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